Lo que era un rumor en la escena local hoy 05 octubre del 2009, fue confirmado por Terra Stereo: La banda Dolores Delirio vuelve a escena con su voz original, Ricardo Brenneisen, quien tras varios años de disputas y desacuerdos con sus ex compañeros, aceptó volver con el grupo que le dio popularidad para “cerrar el mejor ciclo de su vida” y demostrar que, ahora sí, hay madurez de por medio.

Al mando de José Luis Quiroz, ex manager de Volumen Cero en Estados Unidos, el cuarteto (conformado también por Josué Vásquez, José Iñoñán y Juan Carlos Anchante) ensaya secretamente desde hace unas semanas preparando lo que será su retorno, aún sin fecha definida. ¿Honestidad o negocio? Brenneisen dice que este regreso es más que eso. Ya veremos.

-¿Cómo nace la idea de volver a cantar en Dolores Delirio?

Se sumaron varios episodios, la salida de Lucho (Sanguinetti, ex vocalista del grupo) y mis dificultades laborales con Cómplices Eternos (su ex banda). Nos sentamos, conversamos, limamos el tema de la amistad y decidimos empezar a ensayar. Aún hay cosas personales que debemos “afinar”, para que no sea “el polvo con la ex” que fue lo del 2005 (su fallido retorno), que el público y nosotros no queremos en este “tercer retorno”.

-¿Este retorno es sólo para tocar en vivo o existe la posibilidad de grabar un disco nuevo?

Aún no hemos creado, sólo estamos definiendo el proyecto. En principio, es un hecho que volveremos a tocar, pero por ahora no queremos ofrecer nada sin tener algo concreto en mente, por eso hemos conseguido un gerente (manager) que se está encargando de ver los conciertos y las actividades que tendrá la banda cuando todo esto sea oficial.

-¿Eres consciente de que tu regreso a la banda dividirá al público y que quizás sean más los malos comentarios que los buenos?

Sí, soy consciente que habrá muchas críticas por mi regreso al grupo, pero es porque en este país muchos piensan que todo está mal por “default”, el tema de la moral es muy subjetivo en este sentido. Lo único que nosotros queremos con este regreso es cerrar el capítulo de una manera digna, para mí Dolores Delirio es lo que me ha dado los “galones” en la vida.

-Con tantas idas y venidas, cambios de cantantes y demás problemas que enfrentó el grupo, es probable que su credibilidad se haya mellado…

Creo que cuando la banda se monte al escenario esa pregunta será absuelta. Musicalmente, estamos mejor que nunca, porque ninguno de los cuatro hemos dejado de hacer música en los últimos años, y frente a los problemas que antes nos enfrentaron creo que ahora los afrontaremos con mayor madurez, porque ya no somos los darkies de 22 de hace 15 años.

-¿Cuáles son los planes próximos de la banda?

En principio estamos retomando sonido, partiendo desde cero. Sería un poco torpe pensar en una gira sin disco nuevo, especialmente porque ya es casi fin de año y Dolores Delirio nunca fue una banda de verano. No hemos planteado el repertorio (no responde cuando se pregunta si tocarán los temas de Lucho Sanguinetti), sólo queremos tocar y dejarnos fluir, por el momento.

-¿Cuánto de artístico y de económico tiene este nuevo regreso de Dolores Delirio?

Para comenzar, la coyuntura se dio, nadie la forzó. Y sería necio decir que detrás de todo esto no existe el factor económico, pero para que esto funcione nosotros hemos debido de cerrar nuestro capítulo personal y curar heridas del pasado. De hecho las cosas han cambiado, ahora tenemos hijos, las perspectivas son otras a nivel personal. La única forma que esto funcione como proyecto y negocio es que los que nos dedicamos a hacer música, hagamos música, y eso es lo que haremos.

-¿Este retorno tiene fecha de expiración?

Tampoco pensamos en eso, puede que sea por 6 meses o por 20 años. Yo voto por lo segundo.